La tercera vez es la vencida para la cirugía de labio leporino en el Hospital Shriners para Niños Boston

La familia de Eliza se siente eternamente agradecida de que hayan operado a su hija de labio leporino en el Hospital Shriners para Niños Boston.

“La primera cirugía se reprogramó porque tenía COVID. La segunda porque Eliza estaba enferma”, explicó Michelle, la madre de Eliza. “Para la tercera cirugía, estábamos muy nerviosos, pero como dice el refrán, 'la tercera es la vencida'”.

Michelle recibió el diagnóstico de su hija durante una exploración anatómica a las 20 semanas de embarazo y se la derivó al Hospital Shriners para Niños Boston por su obstetra, donde se reunió con Kavitha L. Ranganathan, MD, a través de una llamada de Zoom. A Michelle la tranquilizó esa reunión y, poco después del nacimiento de Eliza, se convirtió en paciente de la Dra. Ranganathan.

La Dra. Ranganathan es cirujana plástica certificada por la junta y codirectora del Cleft and Craniofacial Center del Hospital Shriners para Niños de Boston, un programa de colaboración con Mass General for Children. Los pacientes que acuden para recibir atención obtienen un plan de atención médica integral para satisfacer sus necesidades clínicas y de desarrollo. También tienen la oportunidad de reunirse con cirujanos plásticos, patólogos del habla, ortodoncistas y dietistas en una sola visita.

"Es un honor y un privilegio cuidar de niños con hendiduras y de sus familias en Shriners Children's. Es extremadamente gratificante brindar dicha atención, desde la infancia hasta que son adultos jóvenes. Y brindar esta atención, junto con el equipo excepcional que tenemos, es absolutamente lo mejor" dijo la Dra. Ranganathan.

Las hendiduras faciales se forman en el útero y son la diferencia craneofacial de nacimiento número uno que se trata en Shriners Children's. Un labio leporino se forma cuando el labio no se desarrolla adecuadamente, lo que hace que la sonrisa del recién nacido se rompa. La abertura se puede reparar con cirugía plástica reconstructiva. Muchas diferencias craneofaciales requerirán múltiples cirugías para mejorar la apariencia y la función.

Un labio leporino por sí solo puede requerir una sola operación cuando el niño es bebé: la cirugía de reparación de labio leporino. Un cirujano de Shriners Children's realizará una reparación del labio leporino poco después del nacimiento. Michelle recuerda que durante la cirugía de su hija "todo el personal fue fantástico. La Dra. Ranganathan, todos nos apoyaron y alentaron mucho". Habitualmente, se lleva a los bebés a una cita de seguimiento con el cirujano dos semanas después de la intervención. Dependiendo de la edad del niño, los alimentos blandos generalmente se vuelven a agregar a su dieta después de la visita.

Antes de la cirugía, la familia de Eliza luchaba por conseguir que comiera, por lo que le colocaron una sonda de alimentación gástrica (sonda G). Se coloca una sonda G en el estómago como otra forma para que los niños reciban nutrientes cuando no pueden obtener los suficientes por vía oral.

A Eliza le encanta probar alimentos nuevos desde su cirugía e incluso participa en la cena familiar. Su madre aprecia estos momentos después de temer lo peor. “Nos llena el corazón de amor y alegría ver a Eliza tener tanta positividad hacia la comida”, dijo Michelle. “Al ver su lucha como recién nacida, nos preocupaba que esto fuera algo que afectaría su vida y su crecimiento en general”. Y añadió: “Las palabras no pueden expresar el respeto que tengo por la Dra. Ranganathan. Ella es muy cariñosa y nos trata como si fuéramos familia. Me enorgullece que sea la cirujana de mi hija”.

La familia de Eliza participa activamente en el evento de recaudación de fondos exclusivo del Hospital Shriners para Niños Boston, el Paseo embrujado de Boston. “Estamos orgullosos de decir que recaudamos $1 500 para el Paseo embrujado de Boston 2023”, dijo Michelle. La familia espera continuar ayudando al hospital a través de donaciones, para que los niños con la afección de Eliza u otras necesidades médicas puedan obtener la ayuda que necesitan del Hospital Shriners para Niños Boston.

Michelle ofrece esperanza a otras familias que están pasando por situaciones similares a las de Eliza. “Las cosas van a ser muy duras, abrumadoras y emotivas, pero recuerden: hay tanta gente pasando por lo mismo que no estamos solos”, dijo.