Destacada: Tarra Curran, copresidenta del Paseo embrujado virtual
Tarra Curran, junto con su esposo, John, preside el primer Paseo embrujado virtual del Hospital Shriners de Boston. Desde el 25 de octubre hasta el 2 de noviembre, los participantes podrán salir a caminar desde cualquier punto de partida para apoyar y promover la misión del hospital. El liderazgo de Tarra en la recaudación de fondos para el hospital va mucho más allá de su compromiso filantrópico. Su vínculo con el Hospital Shriners de Boston es profundamente personal.
Cuando era pequeña, Tarra sufrió quemaduras graves en casi el 50% del cuerpo al caer dentro de una tina llena de agua hirviendo. En ese momento, ella y su familia vivían en el Reino Unido, que es donde recibió tratamiento inicialmente por sus quemaduras. Cuando se trasladaron a los Estados Unidos, buscaron un lugar que pudiera brindarle atención continua a Tarra, y fue así que llegaron al Hospital Shriners de Boston.
“Fui paciente de Shriners durante más de una década. Mientras crecía y me acercaba a la adolescencia, me fueron haciendo varias cirugías en las manos, las piernas y el torso, y también me trataron por los problemas de movilidad relacionados”, cuenta Tarra. “Si bien estaba nerviosa y tenía miedo de las cirugías, como cualquier niña, recibí una atención increíble, tanto durante las hospitalizaciones por las cirugías como durante las citas posteriores de seguimiento, para hacer terapia ocupacional y fisioterapia”.
La hospitalizaciones de Tarra oscilaban entre unos pocos días y más de una semana, sin contar las visitas ambulatorias después de las cirugías. Cuando piensa en aquellas épocas en el hospital, Tarra conserva gratos recuerdos del centro de aprendizaje, donde intentaba seguir con sus estudios, ya que algunas de sus cirugías se realizaron durante los años escolares. Además, recuerda cuando viajaba por la carretera con otros pacientes y pasaban “a través del túnel” para ir al Hospital General de Massachusetts y visitar la tienda de regalos. Si bien los viajes no eran largos y no iban muy lejos, ayudaban a levantarle el ánimo durante las estadías en el hospital.
Según Tarra, los médicos siempre se tomaban el tiempo necesario para explicar a sus padres cómo serían los procedimientos quirúrgicos, de modo que supieran qué esperar. “Ahora, como adulta, recuerdo mis años en Shriners como una experiencia absolutamente increíble. Recibí una atención extraordinaria, y el apoyo que nos dieron a mi familia y a mí sin dudas nos cambió la vida”, asegura.
Cada vez que pensaba en su lesión y sus experiencias en el Hospital Shriners de Boston, Tarra sentía que quería retribuir a la organización que la había ayudado a curarse. Puso en marcha esa iniciativa cuando se convirtió en miembro fundador del Corporate Kidz Kouncil de los Hospitales Shriners para Niños de Boston.
Tarra se interesó por el Paseo embrujado virtual porque es una forma creativa y divertida de ayudar a los pacientes mientras reciben la atención médica que puede cambiarles la vida... como la que ella recibió de niña. También se dio cuenta de que le ofrecía la oportunidad de contar su propia historia. “Siempre supe que algún día compartiría mis experiencias en Shriners con un público más numeroso, pero necesitaba tiempo para reflexionar sobre lo que quería transmitir. Cuando me invitaron a ponerme al frente de la Virtual Haunted Walk, me pareció que era el momento oportuno para compartir mi propia historia. Espero que inspire a otras personas para ayudar en lo que puedan, o incluso para formar su propio equipo”, añade Tarra.
Cuando no están promocionando la Virtual Haunted Walk, a Tarra y John les gusta jugar al golf, hacer proyectos de mejoras en su casa y pasar tiempo con sus seres queridos. También les encanta viajar, y esperan poder volver a hacerlo muy pronto.
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