Nacida prematuramente junto a su gemela idéntica en 2015, Taelley enfrentó muchos problemas de salud desde el principio, incluidas una hemorragia pulmonar e hidrocefalia. Los médicos le dijeron a la madre de Taelley, Lindsey, que su bebé nunca caminaría, hablaría ni tendría calidad de vida.
La trayectoria médica de Taelley comenzó con su primera cirugía cerebral, donde se le colocó una pequeña derivación ventriculoperitoneal, cuando pesaba solo 4 libras. A pesar del éxito inicial, hubo muchas complicaciones. Las derivaciones fallaron y se infectó con meningitis estafilocócica. La resistencia de Taelley se puso a prueba aún más por una rara infección cerebral por mycobacterium abscessus que llevó su pequeño cuerpo al límite. Mycobacterium abscessus es una especie de microbacteria no tuberculosas (bacterias muy pequeñas) de rápido crecimiento, resistentes a múltiples fármacos. Esta infección sólo se había informado en el cerebro de un niño en otra ocasión en los Estados Unidos, dos semanas antes que la de Taelley. A Lindsey le dijeron que si no iniciaban una ronda intensa de antibióticos, no sobreviviría. En dos meses, desapareció la infección. Todos quedaron impactados y asombrados por la resistencia de la niña.
Cada vez que le daban un andador o un bastón, ella lo odiaba porque quería caminar sola, sin ayuda. Ver a Tae caminar nuevamente fue un verdadero milagro. Su equipo en Shriners Children's es la razón por la que está caminando hoy aquí.
Taelley enfrentó otro desafío cuando tenía 7 años. Los síntomas fallos intermitentes de la derivación la obligaron a someterse a una cirugía, donde sufrió un derrame cerebral en la mesa del quirófano. A pesar del revés, Taelley mostró un coraje y una determinación notables durante su recuperación.
Después de su desgarrador derrame cerebral, Taelley se embarcó en un viaje transformador en el Hospital Shriners para Niños Northern California. Una intensa fisioterapia y ergoterapia fueron su camino hacia el progreso, respaldado por un equipo de atención dedicado. La terapia fue difícil, pero luchó por superarla, incluso los días que no quería ir. Sus terapeutas la inspiraron y animaron a caminar de nuevo. Tres meses después de comenzar la terapia, obtuvo un nuevo dispositivo ortopédico para la pierna y comenzó a caminar con un bastón.
“Cada vez que le daban un andador o un bastón, ella lo odiaba porque quería caminar sola, sin ayuda”, comentaba Lindsey con orgullo. “Ver a Tae caminar nuevamente fue un verdadero milagro. Su equipo en Shriners Children's es la razón por la que camina hasta aquí hoy”.
El programa BikeFit del Hospital Shriners para Niños Northern California le ofreció a Taelley la oportunidad de hacer realidad su sueño de andar en bicicleta. Con bicicletas adaptadas personalizadas y seis semanas de entrenamiento, Taelley ganó no sólo movilidad, sino también una nueva alegría.
“Todos nos hicieron sentir parte de la familia en el programa. Tae siempre estaba cansada hacia el final del entrenamiento en bicicleta, pero nunca quería parar”, comentó Lindsey. “El programa Bike Fit ha sido realmente sorprendente y ha cambiado la vida de Taelley y nuestra familia. Nuestro patio trasero está detrás de un sendero para bicicletas y ahora todos podemos andar juntos como una familia. La sonrisa en el rostro de Taelley cuando lo hace lo dice todo”.
Hasta la fecha, Taelley se ha sometido a 25 cirugías cerebrales. Ella y Lindsey han estado en una buena cantidad de hospitales y Lindsey sabe lo estresante que puede ser recibir una factura.
“Pasar por algo como lo que hemos pasado y luego recibir una gran factura de hospital es desgarrador”, dijo. “Lo único que puedes hacer es llorar. No me preocupo cuando venimos aquí. Podemos ser vistos y atendidos, lo cual es muy importante. Creo que nunca he visto una factura de Shriners Children's”.
Hoy, Taelley encarna resiliencia y determinación. Caminando, hablando y aprendiendo a correr nuevamente, disfruta la vida con una risa contagiosa y un espíritu ilimitado. El Hospital Shriners para Niños Northern California sigue siendo un faro de esperanza, donde el viaje de Taelley hacia el triunfo continúa.
Taelley trabaja duro con su terapeuta durante una sesión de fisioterapia en el Hospital Shriners para Niños Northern California.
Taelley jugando con una casa de muñecas.
Taelley durante una cita ambulatoria
