Cómo el cuidado más asombroso de Shriners Children's cura desde adentro hacia afuera

Experimentar una lesión por quemadura es traumático para un niño y su familia. Una quemadura no solo puede cambiar permanentemente su apariencia exterior, sino que, en algunos niños, también puede provocar grandes cambios en su interior. Por eso, en el Hospital Shriners para Niños Texas, un equipo dedicado de profesionales del comportamiento compasivos y capacitados está ahí para acompañar a un niño que sufre una lesión por quemadura, en cada paso del camino. Cuidan el bienestar emocional del niño y de sus familias durante todo su proceso de recuperación.

Staci Grant, Psy.D., psicóloga clínica de Shriners Children's, dijo que la atención de la salud mental juega un papel importante en la recuperación de un paciente de una lesión por quemadura. Ese cuidado comienza en el momento en que inician su tratamiento. Un miembro del equipo se reúne con el cuidador y el niño para evaluar si el niño está experimentando dificultades emocionales y de comportamiento, como disminución del apetito, patrones de sueño inadecuados y signos de afecciones como ansiedad, depresión y trauma.

"Se necesita a todo un pueblo" para ayudar a los niños a recuperarse del trauma por quemaduras, dijo Grant. También agregó que otros niños, estudiantes, personal escolar e incluso amigos pueden ayudar a un niño en su proceso de recuperación.

Con tanto tiempo de inactividad entre citas, Grant dijo que es común que los niños y sus familias se acerquen unos a otros por su cuenta. Al tener lesiones y tratamientos similares, los niños y sus familias a menudo encuentran comunidad y amistad en el camino hacia la recuperación. "Muchos niños encuentran validación cuando descubren que «esta persona ha pasado por lo mismo»", dijo Grant, quien también mencionó la Phoenix Society for Burn Survivors como un gran recurso para estos niños y sus familias.

Cuando se trata de terapia conductual, Grant dijo que establecer una buena relación es el primer paso para lograr que un niño participe en el proceso de tratamiento. "Hacerles jugar o hacer una actividad que les interese puede ser útil porque hace que los niños piensen que vienen a terapia sólo para jugar", dijo. Durante la terapia, un miembro del equipo supervisará al niño mientras inician conversaciones centradas en las habilidades de afrontamiento y el manejo de los sentimientos negativos después de su traumatismo.

El Hospital Shriners para Niños Texas también ofrece ayuda a las familias mediante la producción de un video de reinserción escolar para niños que sufrieron quemaduras y se están preparando para regresar a casa. El video describe lo que los estudiantes y maestros necesitan saber cuando el niño regresa a su escuela. Enfatizan que, si bien es posible que el niño haya sufrido una lesión traumática, aún puede realizar algunas de las actividades que disfrutaba antes de la quemadura. "Trabajamos con estudiantes y maestros para recordarles que el niño no es un «niño quemado», sino un niño que tiene una quemadura", dijo Grant.

Si bien muchos niños se preocupan por su aspecto después de una quemadura, a menudo imaginan que las cosas serán mucho peores de lo que realmente son. Según la experiencia de la Dra. Grant, los niños con quemaduras se recuperan de diferentes maneras y a diferentes ritmos, pero la mayoría se vuelve "resiliente". Ella enfatiza en su cuidado con ellos, que en última instancia les corresponde a ellos responder a la pregunta: “¿Importará que tenga cicatrices?” Después de experimentar la atención más increíble en Shriners Children's, para la mayoría, simplemente no es así.