Una dosis de diversión en una labor muy seria
El presidente Andrew Kuo ayuda a los miembros de la junta a hallar soluciones novedosas durante la pandemia
Cuando Andrew Kuo se incorporó a Shriners International, más específicamente a los Salaam Shriners del Norte de New Jersey, su intención era divertirse. Quería estar en un grupo de payasos y hacer reír a las personas, pero no pensaba en la seria labor que lleva a cabo Shriners. "No son tantos los que se suman solo para hacer tareas de voluntariado", señaló Andrew. "Muchos buscan diversión y camaradería, pero pronto se dan cuenta de que puede haber diversión en las tareas más importantes. Ser voluntario y ayudar a los demás también es divertido".
Shriners International es la fraternidad que fundó los Hospitales Shriners para Niños como su obra filantrópica oficial en 1922. La fraternidad, que cuenta con casi 200 asociaciones en varios países y miles de clubes en todo el mundo, continúa apoyando a este sistema de atención médica incomparable.
Andrew es el presidente actual de la junta de gobierno del Hospital Shriners de Philadelphia, y este último año, durante la pandemia, aprendió mucho mientras dirigía el grupo.
Andrew conoció nuestro hospital en 2009, cuando lo visitó durante una celebración de la junta ampliada. Durante ese recorrido, quedó tan impactado con la misión del hospital que apenas tres años más tarde se convirtió en miembro asociado de la junta. "La misión de Shriners se transformó en mi misión personal", dijo.
Andrew impulsa la misión con calidez y una actitud positiva, incluso en el contexto de la pandemia que se desató el año pasado. Según explicó, fue cuando intentaban concentrarse en lo positivo que él y los otros miembros de la junta decidieron buscar maneras novedosas de resolver los problemas de siempre. "No sabíamos qué esperar", dijo, "pero nos dimos cuenta de que al tener que aprender otras maneras de hacer las cosas se nos ocurrían soluciones innovadoras y mejores".
En los primeros días de la pandemia, muchas de esas soluciones implicaban ingresar en el mundo digital. Andrew aseguró que aprendió mucho y muy rápido, y que logró adaptar sus habilidades a lo que exige el siglo 21. "En lo personal, aprendí a firmar documentos digitales", añadió. "Y ahora sé usar Skype, Zoom y Teams. Estoy casi tan modernizado como mis hijos".
"No solo sobrevivimos a este gran desafío, sino que lo superamos con creces", sostuvo Andrew. "Aprendí que podemos hacer cosas de muchas maneras distintas con el mismo éxito. En la recaudación de fondos, fue el mejor año de nuestra historia".
Andrew, inmigrante de primera generación en los Estados Unidos, aseguró que se siente afortunado de tener lo que tiene hoy. "Aquí puedo ganarme la vida y cumplir el deber humano de ayudar a los demás", agregó. Pero lo más importante para él es que puede divertirse haciendo lo que hace. Su principal objetivo en la junta, dijo, es aportar una dosis de alegría y diversión a la labor seria que llevan a cabo.
Al pensar en 2021, Andrew es optimista sobre lo que nuestro equipo podrá lograr durante el segundo año de su mandato. Y aunque aprendió a usar Zoom, tiene muchas ganas de reunirse con la familia de "Shriners Philly" de manera presencial. "Ojalá pudiera ver al personal del hospital en persona y agradecerle a cada uno por creer en nosotros".
Manténgase en contacto
Únase a nuestra lista de correo para mantenerse actualizado sobre todo lo que sucede en Shriners Children's.